Localización: Belthalas, Ciudad Imperial.
Personajes: Reiko, Taron (Presente un rato)
Narra: Reiko Ueda [Sekiho]
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Un viento frio y húmedo surcaba Darkhaven cuando el Mago de los Portales empezó a chillar que el callejon había sido abierto en la ciudad. Alertado por la noticia, cogí mi lanza y recorrí gran parte de New Darkhaven sin encontrar pista alguna. No tardó el popular pregonero en hacer su trabajo y anunciar que un grave peligro se dejaba palpar en la ciudad imperial.
Rápidamente hice memoria y recordé que entre las laberínticas calles de la ciudad, un día un callejon oscuro me llamó en especial la atención. Sin perder un ápice de tiempo me deslícé entre las sombras todo lo rápido que una espectro es capaz y no tardé en llegar al sitio que buscaba. La calle del muerto se extendía frente a mi.
La calle del Muerto
El olor a sangre seca y podredumbre se incrementa hacia el norte. La oscuridad en este punto sólo es rota por el hilo de luz que viene del sur, de la calle del caracol.
(Aura Gris) (Invisible) (Oculto) Algo se mueve entre las sombras.
No tardé en darme cuenta que otro aventurero, seguramente tan atrevido y con tan poco sentido común como yo, rondaba por la ciudad; era Taron Reves. Estaba dandole las indicaciones para llegar a donde yo me encontraba cuando vi una sombra moverse por la calle. Estúpida de mi, agarré con fuerza mi lanza y me lancé al ataque. En apenas 3 rondas estaba incapacitada en el suelo, sin fuerzas para levantarme.
Al despertarme vi llegar a Taron y nos dispusimos a buscar cualquier pista que pudieramos encontrar en aquél lúgubre callejon pero para decepción de ámbos, no enontramos nada de provecho; salvo la misma sombra acechándonos en la oscuridad. El tiempo transcurría y el viento helado se transformó en nieve, haciendo la búsqueda más dificil si cabe. Al cabo de un rato volví a estar sola ya que mi compañero de búsqueda tenía otros asuntos pendientes.
Fue entonces cuando, armada de valor, rodeé a aquella sombra que a poco habia estado de matarme y hable:
Dices 'quien sois?'
Dices 'quiero conocer vuestras intenciones'
Un asesino dice 'somos el gremio de asesinos'
Un asesino dice 'habla con la mano si quieres saber mas'
Un asesino dice 'aqui solo encontraras la muerte otra vez'
Pese a la amable invitación a irme de alli, proseguí:
Dices 'o sea que la Mano..es vuestro lider?
Un asesino dice 'la mano ... es .. el comercial'
Dices 'entonces no es el jefe'
Un asesino dice 'el?'
Un asesino se parte de risa.
Un asesino dice 'anda, no me hagas reir'
Un asesino dice 'somos mas poderosos'
Dices 'intuyo que a vuestro jefe le gusta más...la sangre?'
Un asesino dice 'ultimo aviso'
Un asesino dice 'vete o muere'
El estar al borde de la muerte en semejante callejón no es una experiencia que me hubiera gustado repetir, por lo que pese a mi orgullo Samurai, decidí hacerle caso:
Dices 'esta bien'
Dices 'iré a hablar con él'
Dices 'pero volveré'
Un asesino dice 'y moriras'
Dices 'eso está por ver'
Reiko desaparece entre las sombras
Dando mis asuntos por concluidos en aquel desagradable lugar, partí en busca de un poco de descanso a mi antiguo castillo. Tras dormir unas horas y llenar mi bolsa plateada con alguna que otra poción de mi laboratorio, puse rumbo de nuevo hacia Belthalas, esta vez en busca de la mano. Quien hasta entonces creí que era el cabecilla del gremio de asesinos que me hacía la competencia.
Obviamente me equivocaba. Al parecer el peligro es aun mayor. De todos modos no puedo averiguar nada más sin encontrarme con mi viejo amigo. A ver con qué me sorprende esta vez...
Reiko Ueda,Asesina[Sekiho]
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Esta escena pertenece a Las Ruinas de Darkhaven. Puedes ver el índice en el enlace.
